Más noticias sobre la salud en el frente del Alzheimer: las formas hereditarias de la enfermedad pueden detectarse hasta dos décadas antes de que se desarrollen problemas con la memoria y el pensamiento. Este es un avance de salud prometedor que podría conducir a un mejor tratamiento de esta enfermedad devastadora.
Los hallazgos son significativos porque, para cuando aparecen los síntomas de demencia, la enfermedad ha dañado gravemente el cerebro, lo que hace casi imposible restaurar las habilidades mentales y memorias.
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis han participado en un estudio internacional que estudia formas heredadas de Alzheimer.
Los investigadores están siguiendo a miembros de familias que tienen mutaciones en uno de estos tres genes: proteína precursora de amiloide; presenilina 1; o presenilina 2. Las personas con estas mutaciones desarrollarán la enfermedad de Alzheimer temprano, entre los 30 y los 50 años, ha demostrado una investigación previa.
Los investigadores encontraron una manera de predecir la edad de aparición de la enfermedad entre los participantes del estudio haciendo referencia a sus padres. Por ejemplo, si un padre desarrolló demencia a la edad de 50 años, se esperaría que un niño que heredó la mutación desarrolle demencia aproximadamente a la misma edad. Como resultado, los científicos han podido rastrear la progresión de la enfermedad, incluidos los muchos años que la enfermedad de Alzheimer está activa en los cerebros de las personas, pero los síntomas aún no son visibles.
Curiosamente, los resultados iniciales del estudio muestran que ciertos cambios en el fluido espinal podrían detectarse años antes de la demencia.
Según lo que han visto en su población de estudio, los investigadores han llegado a la conclusión de que los cambios en la química cerebral pueden detectarse hasta 20 años antes de la edad esperada de aparición de los síntomas. Y, concluyen, estos cambios relacionados con el Alzheimer pueden ser específicamente dirigidos a terapias preventivas.
La enfermedad de Alzheimer aflige la mente, causando gradualmente deterioro mental y demencia. Desafortunadamente, hasta la fecha, no hay recuperación para aquellos que tienen esta enfermedad degenerativa del cerebro. La enfermedad ataca las células nerviosas en el cerebro, haciendo que la persona pierda el control de sus emociones, movimiento y memoria. Es una enfermedad frustrante y dolorosa, tanto para la persona que vive con Alzheimer como para las personas que aman. Este trastorno a largo plazo generalmente afecta a personas mayores de 65 años y ahora es la cuarta causa de muerte en adultos.
