La meditación trascendental es una técnica que practicas durante 20 minutos al día, dos veces al día. La práctica no es confesional y se realiza sentado cómodamente con los ojos cerrados. De hecho, más de seis millones de personas han aprendido esta práctica de todas las religiones, culturas y edades.
Un nuevo estudio publicado en PLOS ONE sugiere que la meditación trascendental estimula genes que producen la enzima llamada telomerasa.
Los telómeros son hebras de ADN que protegen los datos genéticos en los extremos de los cromosomas. Algunas personas los comparan con las puntas de plástico en los cordones de los zapatos. Cuando los telómeros se acortan, una persona envejecerá más rápidamente y aumentará el riesgo de cáncer. Se sabe que la telomerasa estimula la producción de telómeros. La enzima también está relacionada con un riesgo reducido de enfermedad cardiovascular, presión arterial alta y mortalidad. Una revisión de 2004 publicada en la revista Circulation Research informó sobre la evidencia de cómo la disfunción de los telómeros desempeña un papel en la hipertensión, la insuficiencia cardíaca y la aterosclerosis.
En este estudio, los investigadores encontraron que la meditación trascendental en particular puede disminuir las tasas de presión arterial alta, accidente cerebrovascular, ataque cardíaco e incluso la muerte.
La presión arterial normal tendrá una lectura sistólica de 120 a 129 milímetros de mercurio (mm Hg) y una lectura diastólica de 80 a 85 mm Hg . Cualquier cosa por encima de esas lecturas está en riesgo de hipertensión, que es un importante precursor de la enfermedad cardiovascular (ECV).
También se cree que la hipertensión es más común en los afroamericanos que en los caucásicos. También puede contribuir a la mayor tasa de mortalidad asociada a ECV en los afroamericanos.
Para la prueba piloto, los investigadores estudiaron a 48 hombres y mujeres afroamericanos con hipertensión en el Howard University Medical Center en Washington, DC
La mitad del los participantes fueron asignados para aprender la técnica de mediación trascendental y un curso básico de educación para la salud. El otro grupo fue asignado a centrarse en los principales cambios de estilo de vida como pérdida de peso, reducción de la ingesta de sal, moderación del alcohol y actividad física regular.
Después de un período de 16 semanas, ambos grupos mostraron reducciones impresionantes en la presión arterial y aumentos en el gen de la telomerasa expresión. Además, no hubo diferencias importantes entre cada grupo. Los resultados sugieren que la meditación trascendental es un método preventivo alentador en la salud cardiovascular.
Aunque los hallazgos del estudio son valiosos, los autores del estudio notaron algunas limitaciones. Para empezar, no hubo un grupo de control inactivo. Los estudios futuros pueden incluir un control con placebo o un grupo inactivo para ayudar a comparar participantes activos con aquellos que realizan una actividad que no se sabe que beneficia la presión arterial o la salud cardíaca. Además, es necesario que haya un estudio más amplio para ayudar a confirmar los resultados del piloto.
A pesar de los inconvenientes del estudio, el principal autor del estudio, John Fagan, elogió los nuevos hallazgos: “El resultado es información nueva y valiosa, relevante tanto a la enfermedad cardiovascular como a los mecanismos moleculares implicados en la meditación trascendental. ”
La meditación trascendental también se ha descubierto que reduce el insomnio, la depresión y la ansiedad, el dolor, el envejecimiento cerebral y los niveles de la hormona del estrés cortisol. También mantendrá a la persona calmada y mejorará la memoria y la función cerebral.
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