Investigadores franceses han descubierto un analgésico innovador, y ha estado al acecho en un lugar inesperado dentro de nuestros propios cuerpos todo este tiempo.
Dolor: es un problema generalizado, con muchas fuentes. En realidad, es solo la manera en que el cuerpo señala que hay algo mal, la mayoría de las veces algún tipo de daño tisular, y que debe tomar medidas y alejarse de la situación peligrosa.
Hay dos tipos principales de dolor: agudo y crónico. La forma aguda se caracteriza por un breve, a veces intenso estallido de dolor, generalmente localizado en un área específica. El dolor agudo puede extenderse y a menudo se vuelve más doloroso, pero generalmente no dura mucho tiempo. Algunos ejemplos incluyen lesiones como cortes, huesos rotos, quemaduras, dolor de cabeza, dolor de oídos, tensión muscular, ataque cardíaco, etc.
La forma crónica es el tipo de dolor que dura más de lo que debería, lo que significa que el evento u objeto que desencadena la respuesta al dolor ya pasó y la respuesta al dolor ya no es útil para ayudar al cuerpo a evitar el daño. Algunos ejemplos de dolor crónico incluyen hernia, úlceras, dolor relacionado con el cáncer, ciertos tipos de dolor de espalda, artritis, lupus, dolor de nervios, etc.
Todos hemos experimentado dolor en algún momento y demasiados de nosotros tenemos que lidiar con el dolor crónico a diario. Los tratamientos para el dolor sí existen, pero siempre se buscan alternativas más efectivas y menos riesgosas. Esta búsqueda constante es lo que ha llevado al último descubrimiento.
Los investigadores franceses descubrieron una molécula en ratas que podría bloquear el dolor. Cuando revisaron a los humanos para ver si tenían una molécula similar, encontraron un potente inhibidor del dolor al que denominaron “opiorphin”. ¿Dónde encontraron exactamente esto? ¡En la saliva de la gente!
Entonces, los investigadores quisieron probar este analgésico para ver cuán efectivo era. En pruebas con ratas, se descubrió que un miligramo de opiorfina por kilogramo de peso corporal tenía el mismo efecto de bloqueo del dolor que el de tres a seis miligramos de morfina por kilogramo de peso corporal. Además, la nueva molécula inhibidora del dolor funcionaba contra diferentes tipos de dolor, incluidas las formas de dolor crónico y agudo. La teoría sobre cómo funciona es la siguiente: la opiorfina podría evitar la inactivación de las “encefalinas”, que son analgésicos naturales (es decir, opiáceos) que existen en el cuerpo humano.
Hay varias razones por las que este “nuevo” bloqueador del dolor se considera importante. En primer lugar, como se mencionó, tiene varias veces el poder de la morfina cuando se trata de suprimir el dolor. En segundo lugar, dado que ocurre naturalmente en el cuerpo, se usa de manera rápida y fácil. En tercer lugar, dado que es una sustancia natural, no debería tener los efectos secundarios que la morfina produce.
Los efectos negativos de la morfina incluyen somnolencia, dificultad para dormir, alucinaciones, problemas de visión, estreñimiento y el deterioro de la función mental, además de que la droga es extremadamente adictiva, por supuesto. Además, los investigadores creen que la opiorfina es más potente y duradera que el único otro analgésico natural que se encuentra en el cuerpo humano, las endorfinas. También piensan que tiene el potencial de funcionar para más tipos diferentes de dolor también.
Ahora que los investigadores han descubierto este potencial bloqueador del dolor en nuestra saliva, necesitan descubrir si existe en otras áreas del cuerpo y de dónde proviene: el cerebro, la sangre, un órgano específico, etc. También necesitan ver cómo La opiorfina interactúa con otros analgésicos naturales del cuerpo (es decir, endorfinas). Los científicos también planean trabajar con opiorphin para crear y estudiar variaciones de la molécula, básicamente, para ver si puede sintetizarse y mejorarse para futuras aplicaciones médicas.