La soda dietética endulzada con edulcorantes artificiales ha estado bajo presión últimamente. Algunos dicen que son malos para ti; otros que son inofensivos. Una compañía dice que la soda dietética podría ayudarte a perder peso cortando el azúcar. Luego aparece un informe que dice que es probable que estos mismos productos aumenten su apetito y aumenten de peso. Parece que los científicos aún no han llegado a un consenso acerca de qué tan benéficos (o perjudiciales) pueden ser los refrescos dietéticos. Sin embargo, más pruebas para los detractores acaban de llegar. Según un nuevo estudio, beber mucha soda dietética puede aumentar su riesgo de enfermedad cardíaca.
Investigadores de la Facultad de Medicina Miller de la Universidad de Miami descubrieron que había un aumento significativo del riesgo de enfermedad cardíaca entre los que bebían refresco de dieta a diario pero no con aquellos que bebían soda regular.
El equipo de investigación evaluó los hábitos de refresco de 2,564 personas inscritas en el estudio grande del norte de Manhattan (NOMAS) para ver si había una asociación, si la hubiera, con un accidente cerebrovascular. Los participantes tenían 69 años de edad, en promedio, y respondieron cuestionarios sobre el tipo de gaseosa que bebían y con qué frecuencia.
Durante el seguimiento promedio de nueve años, ocurrieron 559 eventos vasculares, incluidos infartos causados por hemorragia y los causados por coágulos, conocidos como “ataques isquémicos”.
Los investigadores tuvieron cuidado de tener en cuenta factores como la edad, el sexo, la etnia, la actividad física, la ingesta de calorías, el tabaquismo y los hábitos de consumo de alcohol, pero aún así Resultados: los que bebieron refrescos de dieta a diario tuvieron un 61% más de probabilidades de tener un evento cardíaco.
Los investigadores incluso dieron un paso más. Revisaron la presencia de síndrome metabólico, enfermedad vascular en las extremidades e historial de enfermedad cardíaca. El vínculo entre la gaseosa dietética y la enfermedad cardíaca aún se mantuvo, aunque a un 48%.
Los investigadores no pudieron determinar por qué la gaseosa dietética estaba relacionada con la enfermedad cardíaca. Investigaciones previas de otros han sugerido que aquellos que bebían más de un refresco al día, ya fuera regular o dietario, tenían más probabilidades que los no bebedores de tener síndrome metabólico. El síndrome metabólico, a su vez, aumenta el riesgo de diabetes y enfermedad cardiovascular, según los expertos.
Entonces, ¿qué puede hacer si la gaseosa dietética parece la mejor alternativa a la soda regular en lo que respecta a las calorías? Solo recuerde que la gaseosa dietética, como la mayoría de las cosas, debe beberse con moderación. Intenta sustituir el agua si te encuentras buscando una lata más de una o dos veces al día. Y si el agua no funciona, prueba con té verde o negro, jugo de fruta o agua con un poco de limón o lima. Usted podría estar protegiendo su corazón.