Para la salud natural, pocos alimentos curativos son tan increíblemente poderosos como los peces. El aceite de pescado, rico en grasas omega-3, abarca una gran variedad de increíbles beneficios para la salud. Cualquier consejo de salud digno de su propia sal mencionaría al pescado como parte de la dieta más saludable. Aquí en este artículo, veremos cuatro maneras excelentes en que el aceite de pescado podría ayudar a prevenir la enfermedad cardíaca.
1. Disminuye los triglicéridos: esta es una de las áreas donde los ácidos grasos omega-3 que se encuentran en los aceites de pescado están bien documentados. Cuatro gramos al día de aceite de pescado pueden reducir los niveles de triglicéridos en un 30%; estos niveles son los más sensibles a los omega-3 que usted come en el pescado. Existe una relación específica y documentada entre el aceite de pescado y los niveles de triglicéridos. Una revisión de los estudios encontró que esto es cierto, pero dijo que lo que queda por determinar es cómo los omega-3 hicieron tal cosa. En otros lugares, incluso las personas con altos niveles de triglicéridos cuando no han comido nada recientemente han experimentado mejoras significativas después de comer aceite de pescado omega-3 en un área muy importante: el flujo de sangre a través de sus vasos sanguíneos.
2. Lucha contra la arritmia: algunos estudios han llevado a conclusiones muy interesantes, a saber, que los omega-3 pueden disminuir el riesgo de muerte súbita cardíaca. Los Omega-3 pueden tener un efecto estabilizador en el corazón. Los supervivientes de un ataque cardíaco tenían una frecuencia cardíaca más sana y consistente cuando comían una comida de pescado cada semana. Los dos ácidos en cuestión, EPA y DHA, ayudan a reducir la frecuencia cardíaca en reposo y el flujo sanguíneo a través de los ventrículos. El aceite de pescado tiene potentes efectos “antiarrítmicos” en su cuerpo también. Parece ayudar al tejido cardíaco a resistir el daño, así como a los tejidos alrededor del cerebro.
3. Reduce la presión arterial: Dependiendo de la dosis, los omega-3 pueden tener un efecto pequeño contra la hipertensión. En estudios de investigación donde las personas consumieron muchos de los ácidos grasos (entre tres y seis gramos), la presión arterial disminuyó significativamente. También parece que el DHA es mejor que la EPA a este respecto. Los suplementos de aceite de pescado ayudarán, pero en general el papel de los omega-3 en el control de la presión arterial es limitado por el momento. Sin embargo, esta es otra razón por la cual el pescado es un estimulante del corazón.
4. Reduce la amenaza de la placa: los omega-3 pueden ayudar a prevenir el desarrollo de placa en los vasos sanguíneos y las células, un precursor definitivo de problemas cardíacos. Las respuestas no se entienden fácilmente, pero tiene algo que ver con el metabolismo de las sustancias que ayudan a detener la inflamación. Tanto el EPA como el DHA tienen un efecto sobre el desarrollo de la placa, inhibiendo las moléculas inflamatorias y la posibilidad de que se formen plaquetas.
Estas son cuatro de las razones por las que el aceite de pescado es una de las mejores curas para el corazón.