Según un nuevo estudio publicado en la revista Diabetologia mujeres de mediana edad o mayores que duermen seis horas o menos cada noche, o que agregan dos horas o más de sueño cada noche, tienen un 15% más de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Investigaciones previas sugieren que aquellos que duermen muy poco o demasiado, que no hacen ejercicio y que comen mal tienen un mayor riesgo de volverse obesos y desarrollar diabetes tipo 2. Sin embargo, se había realizado poca investigación con respecto a los cambios a largo plazo en los patrones de sueño. Por esta razón, un equipo de investigación de Harvard T.H. Chan School of Public Health se propuso determinar qué sucede cuando las personas duermen durante más (o menos) horas en el tiempo.
El equipo rastreó a casi 60,000 mujeres estadounidenses, todas ellas enfermeras entre las edades de 55 y 83 años. Los investigadores buscaron cambios en los patrones de sueño de los participantes desde 1986 hasta 2000. Buscaron conexiones entre los cambios del sueño y la diabetes tipo 2 entre 2000 y 2012. Más de 3.500 de las mujeres recibieron un diagnóstico de diabetes durante ese período de tiempo.
Una vez que las estadísticas se ajustaron para tener en cuenta factores como la obesidad, los investigadores descubrieron un vínculo significativo entre los participantes que agregaron dos o más horas de sueño cada noche: tenían un 15% más de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Las mujeres que falta de sueño y trató de ponerse al día le fue peor en el estudio. Los investigadores descubrieron que cuando los que duermen poco sumaban dos horas de sueño cada noche, aumentaban sus posibilidades de desarrollar diabetes tipo 2 en un 21%.
La autora del estudio Elizabeth Céspedes sugiere que, por ahora al menos, no está claro si cambiarán los patrones de sueño prevenir la diabetes Aunque, señala, varios estudios realizados en niños y adultos buscan responder a esta pregunta.
Jane Ferrie, investigadora sénior de la Universidad de Bristol en Inglaterra, elogió el estudio. Sugiere que las mujeres deben informar a sus médicos si sus patrones de sueño cambian por dos o más horas por noche.