Según un nuevo estudio realizado en Canadá, si usted es un adulto mayor que toma medicamentos antiasmáticos para ayudar con su asma o una enfermedad pulmonar asociada, puede aumentar sus probabilidades de desarrollar cataratas. Esta es una noticia importante, ya que en los Estados Unidos más de la mitad de la población desarrollará cataratas o se someterá a una cirugía de catarata a la edad de 80 años.
Una catarata es una condición que tiende a afectar a las personas mayores, dejándolas con una visión deteriorada que puede llevar a la ceguera si no se trata. Básicamente, una catarata se desarrolla cuando la proteína se acumula y se nubla la lente del ojo. Esto reduce la cantidad de luz que llega a la retina, deteriorando así la visión.
Eventualmente, la aglomeración hace que el ojo se empañe, lo que puede volverse lo suficientemente severo como para causar visión borrosa. La mayoría de los casos de cataratas que se observan en pacientes de edad avanzada son el resultado de la aglutinación de proteínas, que ocurre lentamente y se acumula con el tiempo.
Ahora, un equipo de investigación de Canadá acaba de descubrir que las personas mayores de 65 años que toman medicamentos similares a la cortisona (conocidos como corticosteroides inhalados) para ayudar a mantener a raya el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) están en peligro de desarrollar cataratas como resultado.
Los investigadores llegaron a esta conclusión compilando datos de un período de 14 años y de más de 100.000 pacientes que tenían asma o EPOC. El estudio, que se llevó a cabo en el Centro de Salud de la Universidad McGill en Montreal, utilizó datos recopilados de una base de datos provincial de salud. La información que se utilizó en el estudio incluyó información de prescripción y diagnóstico para cada participante en el estudio.
El equipo descubrió que para los pacientes que usaban corticosteroides inhalados cada día, su riesgo de desarrollar cataratas aumentaba en un 24%, en comparación con los pacientes que no usaban los medicamentos que enfrentan el riesgo de desarrollar la enfermedad. También notaron que hubo un aumento en la cantidad de pacientes que solo tomaron la mitad de la dosis diaria típica de la droga inhalada. Entre los 100,000 pacientes que se incluyeron en el estudio, los investigadores también notaron que 10,000 de ellos desarrollaron cataratas que eran de naturaleza severa.
Los investigadores no están descontando los beneficios de los corticosteroides inhalados y no recomiendan que los pacientes de edad avanzada dejen de tomar el medicamento. Sin embargo, los investigadores sí notaron que las personas mayores deberían esforzarse por reducir la cantidad de fármaco que están tomando tanto como les sea posible.
Además, el autor del estudio, el Dr. Samy Suissa, sugiere que las personas a las que se les recete un corticosteroide inhalado deberían tomar un broncodilatador de acción prolongada o una terapia combinada con antileucotrienos, ya que podría ayudar a reducir sus probabilidades de desarrollar cataratas debido a la medicación.
Este nuevo hallazgo es especialmente importante para las personas mayores y sus familiares que ayudan a administrar medicamentos recetados, ya que puede ayudarles a reducir las posibilidades de desarrollar cataratas gracias a los corticosteroides inhalados, que podrían privarles de la vista.