Qigong, Parte 4: Mejora cuatro condiciones comunes

Para el resto de esta serie sobre el antiguo arte de curación de Qigong, nos centraremos en las condiciones de salud específicas que podrían ayudar. Aquí iniciamos con cuatro problemas relativamente comunes: presión arterial alta; ansiedad; dolor de cuello; y fibromialgia.

Aquí se muestran algunos estudios específicos para cada una de estas condiciones:

1. Presión arterial alta

Una prueba de 30 años probó a pacientes con presión arterial alta. Aquellos que no hicieron Qigong tuvieron una tasa de mortalidad 50% más alta (causada por un golpe). Qigong ayudó a estabilizar la presión arterial, mientras que las condiciones de los demás empeoraron. Qigong también ayudó a reducir la necesidad de los pacientes de los medicamentos para la presión arterial, e increíblemente para el 30% del grupo de tratamiento, ¡eliminó por completo la necesidad de medicamentos!

2. Ansiedad

Un grupo de investigadores partió del convencimiento de que el Qigong podría ser un complemento útil para la terapia. En el pasado, descubrimos que el ejercicio beneficia el bienestar de uno en la mente, en el entorno social, en hacer que el corazón esté más en forma y en elevar el nivel de endorfinas. Hasta ahora, estas ideas no se habían aplicado a un ejercicio tan lento como el Qigong. Los investigadores creen que las ideas se pueden reorganizar en las regulaciones de la mente, el cuerpo y la respiración de Qigong. El estudio propone que el Qigong podría ser una excelente terapia alternativa para aquellos que sufren ansiedad que impide la calidad de vida.

3. Fibromialgia

Un estudio reciente mostró que el Qigong podría ayudar a combatir la fibromialgia. Esto es importante, porque la fibromialgia es una enfermedad misteriosa y frustrante. Los tratamientos no son en abundancia. Está bajo el paraguas de la artritis, pero es una enfermedad crónica que causa un dolor generalizado en los músculos y los tejidos blandos de las articulaciones. Golpea el cuello, los hombros, la columna vertebral y las caderas con más fuerza. Pero hay muchos otros síntomas persistentes que también pueden atacar.

El Qigong se usó durante siete semanas en 30 pacientes. Los investigadores encontraron “mejoras significativas” en varios aspectos del dolor y la salud mental. (La depresión y la angustia son comunes entre estos pacientes). Cuatro meses después del estudio, la mayoría de estos pacientes todavía disfrutaban de estas mejoras. Los investigadores concluyeron que el Qigong tenía “efectos positivos y confiables” sobre la fibromialgia. Creen que el tratamiento chino puede ser un acompañamiento eficaz y seguro para la medicina convencional.

ADEMÁS: Tratar el dolor de la fibromialgia de forma natural.

4. Dolor de cuello

Un estudio reciente probó el Qigong y la terapia de ejercicio en pacientes que vivieron con dolor de cuello durante mucho tiempo. El dolor no parece tener una causa; simplemente permanece por un largo tiempo. Se llama “inespecífico”. Esta es una aflicción que es frustrante y los tratamientos para ella son difíciles de encontrar. Los pacientes nunca saben si algo funcionará o no. Dado que el Qigong no se había estudiado para el dolor inespecífico del cuello, los investigadores decidieron intentarlo.

Involucró a 122 pacientes (edad promedio: 44) que hicieron Qigong o terapia de ejercicios. Tenían al menos 12 tratamientos durante tres meses. Durante un año de seguimiento, los investigadores notaron la frecuencia e intensidad del dolor de cuello, la discapacidad general y el rango de movimiento. Descubrieron que tanto la terapia de ejercicio como el Qigong fueron efectivos: mejoraron significativamente los síntomas y esa mejoría duró 12 meses después. El estudio recomienda una terapia para personas que sufren dolor cervical misterioso a largo plazo. Función