Aquí hay algunas noticias de salud que vale la pena tomar en cuenta: los ácidos grasos omega-3 podrían ayudar a los pacientes con stents a evitar los coágulos sanguíneos, reduciendo el riesgo de un ataque al corazón que ponga en peligro la vida. Otra investigación ha sugerido que los alimentos ricos en omega-3, incluidos los pescados grasos como el salmón, ayudan a reducir el riesgo de problemas cardíacos en aquellos con enfermedad arterial coronaria existente. Este último estudio es un gran avance en salud; sin embargo, como sugiere, se descubrió que los omega-3 ayudan específicamente a aquellos con stents.Un stent es un pequeño tubo colocado en una arteria coronaria para mantenerlo abierto y permitir el flujo normal de sangre y oxígeno al corazón. Pero si se forma un coágulo sanguíneo en el sitio del stent, puede bloquear el flujo sanguíneo y resultar en un posible ataque cardíaco.Investigadores polacos investigaron la capacidad de los omega-3 para ayudar a los pacientes con stents en un ensayo clínico reciente. El equipo de investigación estudió a 54 pacientes, en promedio unos 63 años de edad. Todos tenían las arterias obstruidas abiertas por un procedimiento de catéter y luego se insertaron los stents para mantener los vasos abiertos.
Todos estaban bajo tratamiento médico estándar. Veinticuatro pacientes fueron asignados aleatoriamente para recibir una píldora de placebo al día y 30 pacientes recibieron 1,000 miligramos de omega-3 (EPA y DHA) en forma de píldora diariamente.
Los investigadores encontraron que aquellos que tomaron los ácidos grasos omega-3 tenían coágulos que eran más fáciles de romper. También encontraron que, en general, había una menor formación de coágulos después del tratamiento en comparación con el grupo placebo. Los investigadores notaron que los pacientes que tomaban omega-3 no solo producían menos trombina, pero también tenían coágulos más grandes, lo que explicaba por qué los coágulos eran más fáciles de romper. El tiempo de rotura del coágulo en esos pacientes también fue 14.3% más corto que en los pacientes que tomaron píldoras de placebo.
Los investigadores concluyeron que administrar ácidos grasos omega-3 a pacientes estables después de la colocación del stent podría mejorar los resultados de salud.
Por lo tanto, tome este consejo de salud: los ácidos grasos omega-3 son buenos para su sistema cardiovascular, sin importar en qué forma esté su corazón. Agregue algunos suplementos de aceite de pescado, especialmente si tiene un stent.
