Esto es lo que los investigadores encontraron utilizando técnicas de imágenes del cerebro para ver qué pasa con la edad. Hay una capacidad reducida de ese hipocampo para hacer su trabajo. Y los recuerdos más antiguos pueden interferir con los nuevos mucho más que con las personas más jóvenes. También ayuda a explicar por qué el recuerdo es común, porque los recuerdos más antiguos son más fáciles de recordar que lo que sucedió la semana pasada.
Vino de un estudio de 40 jóvenes universitarios y adultos de 60 a 80. Todas las imágenes vistas de objetos cotidianos, tales como piñas y tractores, clasificándolos como “interiores” o “exteriores”. Algunas imágenes eran similares, mientras que otras eran muy diferentes. ¿Podrían los cerebros de las personas verlos como familiares?
Para una persona mayor, las imágenes tenían que ser muy distintas para poder clasificarlas correctamente como nuevas. Si fueran similares, una persona mayor tenía dificultades para decidir si cada uno era viejo o nuevo. Cuanto más similares eran las imágenes, más luchaba el hipocampo de la persona mayor para hacer esto. Los exámenes posteriores mostraron que las personas mayores simplemente tenían más problemas para distinguir entre elementos similares. Se preguntaban si lo habían visto antes o no.
Esta idea “similar” es clave, ya que está vinculada a la “vía perforante”, que dirige la entrada del cerebro al hipocampo. Cuanto más degradado sea el camino, es menos probable que el hipocampo almacene recuerdos similares a los recuerdos antiguos. Este es un gran paso para descubrir las razones detrás de la pérdida de memoria relacionada con la edad. Y los investigadores esperan que ayude a ampliar la comprensión de la demencia, incluso el tratamiento.