En un absoluto mamut estudio a largo plazo, los investigadores noruegos querían ver qué riesgo tenían de uno a cuatro cigarrillos por día sobre el riesgo de morir de enfermedades relacionadas con el tabaco. Más de 40,000 hombres y mujeres se sometieron a pruebas de salud a principios de los años setenta. Los investigadores rastrearon su estado de salud hasta 2002. Hallaron algunas conclusiones definitivas:
- Los fumadores ligeros tenían tres veces más probabilidades de morir de enfermedades cardíacas que los no fumadores.
- Las mujeres fumadoras ligeras tenían cinco veces más probabilidades de morir a causa de los pulmones cáncer.
- Cualquiera que fuera un fumador ligero tenía un riesgo 1,5 veces mayor de morir prematuramente por cualquier causa.
El impulso: los fumadores leves ponen en peligro su salud. En realidad, no debería ser una gran sorpresa: después de todo, un cigarrillo se compone de una increíble variedad de productos químicos tóxicos y no menos de 60 carcinógenos conocidos. Los lleva directamente a sus pulmones, y luego a cada parte del cuerpo. Pero terminemos esto con una nota positiva. Aquí hay siete consejos para dejar el hábito:
- Tire todos los cigarrillos y ceniceros de su casa, automóvil y trabajo. Establezca un día en que saldrá. No permita fumar en su casa. No te permitas una recaída.
- Deja de fumar alterando tu rutina diaria. Coma cosas diferentes, vaya a diferentes lugares, evite las cosas que le recuerdan fumar.
- Obtenga asesoramiento profesional de la Asociación Americana o Canadiense de Pulmón.
- Pregúntele a su médico acerca de posibilidades tales como el bupropión con medicamentos orales, el parche de nicotina o un aerosol nasal de nicotina.
- Si tiene problemas para dejar de fumar, busque la hipnoterapia y el poder de la sugestión.
- Reduzca el consumo de alcohol.
- Lobelia es el único remedio herbal conocido. Su ingrediente principal lobeline podría sofocar el impulso de fumar