El equipo de investigación descubrió que k disminuyó la presión arterial sistólica en 16 puntos en comparación con el agua (178 frente a 195 mmHg). La leche también tuvo un efecto antihipertensivo. La leche activa mejoró la disfunción endotelial arterial. En conclusión, los investigadores afirmaron que el tratamiento prolongado con leche fermentada enriquecida con tripéptidos y esteroles vegetales podría disminuir la presión arterial sistólica, mejorar la disfunción endotelial y afectar las vías de señalización relacionadas con las respuestas inflamatorias.
La leche de vaca es una muy buena fuente de vitamina D y calcio: dos nutrientes que juegan un papel importante en la promoción de huesos fuertes. Además, la leche de vaca es una muy buena fuente de yodo (un mineral esencial para la función tiroidea), una muy buena fuente de riboflavina y una buena fuente de vitamina B12 (dos vitaminas necesarias para la salud cardiovascular y la producción de energía).
Aquí hay un consejo de salud: trate de comprar leche producida por vacas alimentadas con pasto. Contiene un ácido graso beneficioso llamado ácido linoleico conjugado (CLA). La investigación ha demostrado que el CLA inhibe varios tipos de cáncer en ratones. Los estudios in vitro (tubo de ensayo) indican que este compuesto podría matar el cáncer de piel humano, el cáncer colorrectal y las células de cáncer de mama. Otra investigación sobre CLA sugiere que esta grasa beneficiosa también puede ayudar a reducir el colesterol y prevenir la aterosclerosis.
Para más información sobre CLA, lea el artículo CLA para Control de peso.